Más de medio millar de personas se afanaron ayer en la búsqueda del menor en batidas durante todo el día.
Cinco
días de búsqueda y ni rastro de Miguel Serrano, el niño de 14 años con
síndrome de down, que desapareció el pasado jueves del camping de las
Herrerías, situado en la Sierra de Cazorla. El menor fue visto por
última vez en las inmediaciones del camping en torno a las 17:30 horas
del pasado jueves y hoy, muchas horas después y tras infinitas batidas
por la Sierra de Cazorla, continúan abiertas todas las hipótesis porque
no hay ni señal ni indicio de qué le pasó y dónde puede encontrarse
"Miguelito", como le llaman cariñosamente familiares y amigos.
Toda ayuda
es poca y en estos casos el tiempo siempre juega en contra. Una oleada
de voluntarios venidos en cinco autobuses procedentes de Montilla y
Córdoba y otros varios cientos de voluntarios, que conocen la Sierra
como la palma de la mano, naturales de alguno de los puntos del Parque
Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, llenaron otro autobús y varias
decenas de vehículos propios, para sumarse a la búsqueda de Miguel, que a
última hora del día de ayer continuaba en paradero desconocido después
de que durante todo el fin de semana el dispositivo de búsqueda se haya
ido intensificando hasta que ayer se desbordaran todas las expectativas.
Al Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA), unidades caninas, Bomberos
de Guadix, Policía Local, Protección Civil, agentes del Infoca, Policía
autonómica y Guardia Civil, que envió un helicóptero procedente de
Granada, que ha estado sobrevolando la zona mientras el tiempo se lo ha
permitido se sumaron los voluntarios y un grupo de escaladores, que
guiados y escoltados por los grupos especialistas hicieron ayer sendas
batidas por la zona.
nuevas
oleadas de voluntarios al camping del Puente de las Herrerías desde
donde se organizaron las batidas del día. Ataviados con ropa de abrigo,
bastones y mapas se dispusieron a salir al monte en grupos en los que se
incluían agentes forestales, Guardia Civil y miembros de Protección
Civil. Así, durante todo el día se fue ampliando el perímetro de
búsqueda hasta llegar a la Nava del Espino, bordear los Rasos, Vadillo
Castril, Cerrada de Utrero y la Fuente del Oso entre otras zonas.
Además, se rastreó toda la ribera del río Guadalquivir, junto al cámping
en el que han estado alojados los familiares y Miguel Serrano durante
toda la Semana Santa. A última hora de la tarde, los voluntarios antes
de venirse con las manos vacías y la sensación de que el niño no se
encontraba en la Sierra de Cazorla, y a pesar de que ya había comenzado a
llover, pidieron hacer una última batida en las zonas más cercanas al
camping, donde tampoco se encontró nada. Por su parte, las unidades
caninas después de oler prendas del niño salieron a su búsqueda y aunque
a priori parece que encontraron el rastro en varias ocasiones lo
perdieron en una zona cercana a la carretera, antes de encontrar nada.
A primera hora de la mañana comenzaron a llegar las
A última hora del día, el capitán de la Guardia Civil, Corpas, aseguró que "el avance
que hemos tenido en las últimas 24 horas ha sido de recorrer un
territorio mayor, aumentar el diámetro de los círculos pero el resultado
no ha sido favorable a pesar de todos los medios que tenemos". Respecto
al dispositivo de las próximas horas o días aseguró que "seguiremos con
la búsqueda y aumentaremos el radio de acción".
El portavoz de la familia,
José María Dobladez, hermano de la madre del desaparecido, confirmó que
la última vez que los padres hablaron con Miguel iba camino de "la
tirolina que está en las instalaciones del camping, donde al parecer no
pudo hacer la actividad y se volvió algo enfadado", así, aseguró que
"una limpiadora lo vio sobre esa hora cerca de los aparcamientos del
camping un poco enfuruñado". Minutos después de la desaparición, los
padres dieron la voz de alarma y todos los usuarios del camping se
pusieron a buscarlo, también durante la noche por la carretera cercana.
Dobladez, manifestó que anteriormente "no se había perdido" y que por su
carácter "regular y matemático" cuando en ocasiones se había despistado
"siempre vuelve al lugar de origen, no hace comportamientos erráticos,
sino que vuelve al punto de partida". Además, si se enfada "vuelve a
darle la queja a sus padres, no toma la iniciativa de irse a ningún
sitio porque sus comportamientos son muy automatizados". De esta manera,
insistió en que "es muy extraño que si salió a la carretera y dada la
afluencia de visitantes al Parque nadie lo haya visto". Aún así, y
agradeciendo la labor de especialistas y voluntarios pidió que "el
dispositivo continúe y se mantenga porque es la única manera de que todo
el trabajo de su fruto y los familiares podamos tener una respuesta"
El alcalde de Cazorla, Antonio José Rodríguez, manifestó que seguirán colaborando y poniendo a disposición de los voluntarios autobuses mientras lo necesiten y "esperamos que en las próximas horas tengamos buenas noticias".
El alcalde de Cazorla, Antonio José Rodríguez, manifestó que seguirán colaborando y poniendo a disposición de los voluntarios autobuses mientras lo necesiten y "esperamos que en las próximas horas tengamos buenas noticias".
HIPÓTESIS
Por el momento todas las hipótesis son válidas y el rastreo continúa tanto a pie de carretera, como campo a través y en el río con zodias de la Guardia Civil, porque no se descarta que se hubiera caído, a pesar de que no baja muy caudaloso por esa zona. Al padecer síndrome de down y ser asustadizo temen que el miedo lo llevara o a andar y alejarse, dado que "tiene fuerza física y está fibrado" o a esconderse.
Por el momento todas las hipótesis son válidas y el rastreo continúa tanto a pie de carretera, como campo a través y en el río con zodias de la Guardia Civil, porque no se descarta que se hubiera caído, a pesar de que no baja muy caudaloso por esa zona. Al padecer síndrome de down y ser asustadizo temen que el miedo lo llevara o a andar y alejarse, dado que "tiene fuerza física y está fibrado" o a esconderse.
DESAPARECIDO
El niño desaparecido, que responde al nombre de Miguel Serrano Dobladez, es natural de Montilla (Córdoba) y en el momento de la desaparición llevaba, según los familiares, una camiseta de manga corta roja, un pantalón de chándal azul oscuro, zapatillas deportivas negras y gafas.
El niño desaparecido, que responde al nombre de Miguel Serrano Dobladez, es natural de Montilla (Córdoba) y en el momento de la desaparición llevaba, según los familiares, una camiseta de manga corta roja, un pantalón de chándal azul oscuro, zapatillas deportivas negras y gafas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario