«Si os preguntan cuántos estábamos, que sepáis que no se
ha podido hacer ninguna foto porque no cabíamos en ninguna calle de esta
ciudad», proclamó de entrada el secretario provincial de CC OO, José
Moral, al término de la manifestación que recorrió el centro de la
capital jienense, con amplia participación, diversidad de posiciones y
con algunos momentos de tensión, aunque al final no se registraron
incidentes graves.
Bajo el lema 'Nos dejan sin futuro. Hay culpables. Hay
soluciones. Huelga general', la manifestación partió a las doce horas
desde la glorieta de Blas Infante, con los acordes por megafonía de 'La
Internacional' y 'Andaluces de Jaén', entre otros, y ocupando un margen
de la Avenida de Andalucía. Al otro lado y a pocos metros de la
Universidad Popular Municipal, miembros de los autodenominados
sindicatos alternativos que enarbolaban banderas de SAT, CNT y CUO
ocupaban una sucursal bancaria y gritaban consignas contras los banqueros («No son desahucios, son asesinatos»):
Cuando la manifestación llegó a su altura, los gritos, ya
en la calle, se volvieron contra los sindicatos mayoritarios («CC OO y
UGT, sindicatos del poder») y contra PP y PSOE, y se escuchó el
estruendo de los petardos. Parte de la manifestación, en la que había
muchos militantes socialistas, contrarrestó haciendo sonar sus silbatos,
pero otra parte se paró para aplaudir a los 'alternativos' cuando éstos
corearon «¡Este banco, lo hemos ocupado!». Incluso algunos saltaron la
mediana. El cordón policial, que controló de manera especial la protesta
alternativa, cortó al final el tráfico, que se restableció minutos
después cuando pasó la manifestación y los alternativos se sumaron al
final de la misma, juntos pero no revueltos.
El otro momento de mayor tensión se vivió ante las
puertas de El Corte Inglés, fuertemente custodiado por agentes del
Cuerpo Nacional de Policía, como en ocasiones anteriores, y que
permaneció abierto aunque cercado. Eso hizo que la manifestación le
hiciera blanco de sus gritos al pasar, también a los policías, con
alusiones a que éstos tampoco van a cobrar la paga de Navidad. «Tú,
madero, aprende del bombero», se escuchó con fuerza en referencia a los
bomberos que participaron en la protesta y que fueron muy aplaudidos.
Cuando llegó la cola de la manifestación, no sólo se paró
ante las puertas de los grandes almacenes sino que llevó la protesta
ante las narices de los agentes, que se colocaron el casco
antidisturbios, lo que a su vez encrespó aún más los ánimos. Arreciaron
entonces los insultos, alguna cara se cubrió para no ser identificada y
se temió el cuerpo a cuerpo. Pero responsables de CGT, SAT y exdirgentes
de IU, como el exteniente de alcalde, José Luis Cano, apaciguaron los
ánimos y propusieron seguir la manifestación.
En la misma también se hicieron notar, además de CC OO y
UGT, los sindicatos USO y Ustea, la organización de consumidores Facua,
PSOE, IU, Equo, manifestantes llegados de otros municipios que
reclamaron un PER especial y escenificaron la recogida de la aceituna,
jóvenes, profesores, bomberos, pensionistas, de la plataforma contra los
desahucios y, cerrando la comitiva, una pancarta totalmente en blanco
sostenida por quienes no querían identificarse con ningún sindicato ni
partido y que dijeron representar a muchos ciudadanos afectados por la
crisis.
La subida de la Avenida de Madrid se hizo sin incidentes
reseñables, a buen paso y con temperaturas más otoñales que invernales,
hasta la Plaza de Santa María, para escuchar los discursos. Por el
camino se fueron quedando algunos, bien llegados de otros municipios, o
de los sindicatos alternativos, que quedaron para recorrer las calles
más comerciales a primera hora de la tarde y para una manifestación
propia.
El comienzo
Las primeras horas de huelga en la provincia se
desarrollaron sin incidentes graves, a excepción de un momento de mucha
tensión (1,30 horas) en el pabellón postal de Jaén, donde
un camión realizó una maniobra peligrosa con riesgo de atropello
-los hechos fueron denunciados en Comisaría por CCOO-. Y es que la
acción de los piqueteros, unos 500 en la capital y 300 en distintos
municipios jienenses, fue vigilada por un amplio despliegue de las
fuerzas de seguridad, tanto Policía Nacional como Guardia Civil y
Policía Local. Los turnos de noche de las
principales industrias de Jaén se paralizaron,
como sucedió en Cuétara, Heineken, Valeo o Koipe (Andújar), y tampoco
hubo actividad en otros puntos calientes, como centros de distribución o
la
planta de basura de la carretera de Fuerte del Rey.
Además, no llegaron los camiones con el grueso de la correpondencia -lo
hacen normalmente a las dos de la madrugada-, por lo que el reparto de
cartas se redujo a mínimos.
También salieron con normalidad los buses de la empresa Castillo asignados como servicios mínimos:
A las 6,30 horas, agentes de la Policía Nacional
realizaron un pasillo por el que iban saliendo los vehículos, evitando
que se pincharan las ruedas, como ocurrió el 29-M. También dentro de los
autobuses iban efectivos de la Policía Local para evitar sabotajes a lo
largo del recorrido.
La situación en el Polígono de los Olivares a las siete
de la mañana era como la de cualquier laborable. Los bares estaban
abiertos, también se observaba movimiento en muchas naves y la
Inspección Técnica de Vehículos se preparaba para recibir a los primeros
coches. En las gasolineras, todo normal. Desde las 7,30 horas el grueso
de los piquetes se trasladó hasta el centro. Algunos se ubicaron en
organismos dependientes de la Administración del Estado, como la
delegación de Hacienda, y otros en la sede central de la Junta de
Andalucía, en el Paseo de la Estación:
La apertura de establecimientos comerciales, entre las 9,30 y las 10,00 horas,
también se produjo sin novedad,
aunque las tiendas iban abriendo y cerrando en función del paso del
piquete itinerante, escoltado en todo momento por una decena de
policías:
Grandes superficies como El Corte Inglés levantaron sus persianas a las 10,00 horas sin incidencias.
En la provincia
¿Y qué hay del seguimiento de la huelga por la provincia? A medio gas, podría ser el resumen.
En Linares,
extremada tranquilidad y mucha policía en la calle. La poca actividad
que habitualmente hay desde hace meses en el Parque Industrial de
Santana cesó al 100% con motivo del 14N.
En Andújar,
la convocatoria tuvo poco calado.. Los comercios abrieron de forma
generalizada y los polígonos industriales desarrollaron el ritmo
habitual de trabajo. Las entidades bancarias contaron con todo su
personal así como los supermercados, grandes superficies y la Plaza de
Abastos.
Respecto a
Alcalá la Real,
la mañana fue tranquila. Por la Avenida de Europa, los servicios de
limpieza municipales no se vieron como otros días. Los diversos bares
fueron abriendo sus puertas y el servicio de butano circulaba por las
calles. Las puertas del IES Alfonso XI estaban abiertas y los alumnos
acudieron a clase con normalidad.
En cuanto a
Martos,
la jornada de huelga general tuvo una escasa repercusión, ya que se
mantuvieron todos los servicios abiertos y solo en la zona industrial se
notó algo más la inactividad.
En las localidades de la
Sierra de Cazorla,
la mañana transcurrió sin más alboroto que las concentraciones y
manifestaciones que con escasa participación recorrieron las calles de
algunos pueblos.
Por lo que se refiere a
Bailén,
Mercadona, LIDL y Día desafiaron la convocatoria de huelga. En la calle
principal, donde se aglutina la mayoría del pequeño comercio del
centro, el seguimiento fue mitad por mitad.
Y, en cuanto a
Úbeda,
la normalidad fue la tónica reinante durante la jornada, con
satisfacción entre los sindicatos por el amplio seguimiento en el sector
privado, sobre todo en la mayoría de los grandes centros de trabajo, y
decepción por la respuesta de los trabajadores públicos.