El Ejecutivo plantea reducir los canales y obligar a los usuarios a gastar hasta 2.000 euros en adaptar sus antenas
22.06.12 - 12:19 - COLPISA | MADRID
Ver la tele en alta definición puede convertirse en un
lujo no al alcance de todo el mundo y en un estándar de calidad solo
para canales de audiencia minoritaria, si el proyecto que el Gobierno ha
presentado al sector audiovisual sale adelante. De cumplirse la
amenaza, supondría un lastre para el desarrollo de la televisión en alta
definición. En la actualidad, los grandes eventos deportivos y las
mejores series se emiten simultáneamente, en calidad estándar (SD) y en
alta definición (HD), pero el proyecto del Ejecutivo prohíbe la emisión
duplicada, lo que obligará a las cadenas a emitir los programas y
acontecimientos deportivos más importantes en calidad estándar en lugar
de en alta definición, ya que el actual parque de televisores con esta
tecnología es aún pequeño.
El nuevo Gobierno ha planteado a las cadenas de
televisión una redistrbución de los canales que tiene por objetivo
reducir un 20% (de seis múltiplex digitales a cinco) la capacidad de las
cadenas privadas nacionales, lo que obligaría a concentrar las
emisiones de alta definición en unas pocas frecuencias a las que solo
podrían acceder quienes tengan un televisor con HD.
Pero el gasto no se limita a cambiar de televisión, una
inversión que de por sí puede rondar, o superar, los 1.000 euros.
Adaptar las antenas comunitarias a las nuevas necesidades que plantea el
Gobierno asciende a entre 400 y 2.000 euros por comunidad. El Ejecutivo
se había comprometido con anterioridad a asumir ese cargo, pero
Facua-Consumidores en Acción denuncia que el Ministerio de Industria no
ha incluído estas cuantías en los Presupuestos Generales del Estado.
En la actualidad, las cadenas de televisión emiten a
través de diez multiplex, cada uno de ellos formado por cuatro canales.
TVE dispone de dos multiplex; las autonómicas, de otros dos, y seis
adjudicatarias privadas (Antena 3, Telecinco, Cuatro, La Sexta, Net TV y
Veo TV) tienen cada una de ellas un multiplex. El Ejecutivo pretende
pasar de diez a ocho multiplex y que las cadenas tengan en cada uno de
ellos tres canales de televisión convencional en lugar de los cuatro
actuales, una doble reducción que impedirá a las empresas audiovisuales
desarrollar sus proyecos.
El objetivo final del Gobierno es ceder a las compañías
de telecomunicciones las bandas que queden libres a partir del 1 de
enero de 2014 porque cree que en el futuro el negocio de la telefonía
móvil será mayor que el audiovisual. Fuentes de las cadenas resaltan la
inseguridad jurídica a la que se vería sometido el sector ya que con
esta iniciativa, el Gobierno quiere cambiar las reglas del juego a mitad
del partido.
La Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (UTECA)
confirmó ayer haber recibido una propuesta de la Secretaría de Estado de
Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, dependiente
del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, para reordenar las
frecuencias de la TDT y confía en que las negociaciones lleguen a buen
término en un plazo breve.
UTECA afirma que esta propuesta supone solo un paso más
dentro del proceso de conversaciones que, desde hace tiempo, se mantiene
con la Secretaría de Estado y otros agentes involucrados y confía en
que las negociaciones lleguen a buen puerto.
Las cadenas privadas, de acuerdo con el sector, han
propuesto, por su parte, al Ejecutivo mantener el actual ordenamiento
con el compromiso de bajar de modo considerable los costes de
antenización en los que debería incurrir el estado si se termina de
desarrollar tal y como está previsto actualmente la ocupación del
espacio radioeléctrico.
Facua pone el foco en el televidente cuando resalta la
posible alteración de la competencia del mercado en perjuicio de los
consumidores, como ya ha sucedido con las ayudas a la renovación de los
electrodomésticos.
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