Aún solo son
estimaciones, aunque tiene el rigor de un cálculo oficial. La producción
de aceite de oliva de Jaén volverá a ser determinante en el mercado
mundial. Realmente, paradójico ya que, luego, sus empresas no son
capaces de dominarlo.
El
Consejo Oleícola Internacional (COI) tiene claro que los olivareros
jiennenses son determinantes para que el planeta tenga aceite de oliva.
No hay que olvidar que es uno de los productos agroalimentarios con
mayor incremento en el consumo durante los últimos años. Si se desea
estabilidad en los precios y tranquilidad entre los operadores, hay que
mirar con lupa el olivar de Jaén y hasta contar sus aceitunas antes de
planificar la próxima campaña comercial en el mundo.
Si se toma como referencia el Primer Aforo Oficial de la Junta de Andalucía —580.000 toneladas condicionadas por la necesidad de lluvia, que aún no llega—, Jaén producirá el 41% del zumo de aceituna que dará España. El COI estima que el campo español generará 1.400.000 toneladas. Sin embargo, también da la previsión de cosecha de todos los países, que la sitúa en 3.142.500 toneladas. Si se toma esta cifra como referencia, Jaén será aún más determinante porque se convertirá en la gran “alcuza” del mundo porque dará el 18,4% de la producción mundial.
Los cálculos de los organismos oficiales también desprenden una gran conclusión. Jaén no cede el liderazgo mundial en la producción, pese a que los olivareros han vivido, durante los últimos años, bajo la amenaza de perder peso en la cosecha mundial debido a la entrada en funcionamiento de olivares superintensivos en otros países. Sin embargo, por el momento, esto no ocurre. Jaén que ha ganado terreno y roza, año tras año, el 20% de la cosecha internacional. Por ello, queda claro que los olivareros jiennenses han contrarrestado este fenómeno con más trabajo, regadío, mejores abonos y más rendimiento en las explotaciones. De hecho, hay muchos que introducen más árboles en sus calles para contrarrestar la bajada de precios con más producción.
No perder terreno en esta cosecha es difícil, sobre todo, porque el COI augura que será una de las mayores que ha tenido el mundo. Espera 3.142.500 toneladas de aceite de oliva, que es una cantidad impresionante. No obstante, tranquiliza el incremento del consumo en países que, tradicionalmente, no han utilizado demasiado esta grasa, ya que los grandes importadores se muestran más estables en sus compras.
España liderará la producción mundial gracias a Jaén. De hecho, las 580.000 toneladas de aceite que se le atribuyen no serán superadas por ningún país europeo ni de otro continente. Italia dará 440.000; Grecia, 310.000, y Portugal, 71.800, que son los grandes productores del continente. Precisamente, la UE generará dentro de sus fronteras 2.233.300 toneladas de aceite de oliva.
Otros productores. Siria vuelve a destacar entre los países no europeos productores de grasa de aceituna. El COI le atribuye 200.000 toneladas para la próxima campaña. Túnez y Turquía aportarán 180.000 —cada uno—, mientras que Marruecos se queda en 120.000. Argentina es un país que sorprende porque se estima que dará 15.000 toneladas, pese a que hace tres y cuatro años rondaba las 25.000. Argelia contará con 54.500 y Jordania destaca por su tremenda estabilidad, ya que se queda en 22.000.
Asimismo, existen otros que emergen como productores de aceite de oliva, pese a que, hasta ahora, carecían de tradición. Australia dará 19.000 toneladas. Precisamente, este país es uno de los que mejor comportamiento demuestra en consumo, por lo que sus agricultores se han aventurado en la olivicultura, pese a que Oceanía tiene muchas zonas en las que no se dan las condiciones adecuadas para el olivo, que es un árbol claramente mediterráneo. No obstante, Australia destaca por su tremenda estabilidad en las cosechas, a diferencia de Argentina. Palestina aportará 10.000 toneladas de aceite de oliva y Chile, alrededor de 22.000.
Resulta significativo el caso de Chile, que se ha lanzado al cultivo del olivar con mucho apoyo de sus administraciones. En 2007 produjo 6.500 toneladas. En cambio, para la próxima cosecha se esperan alrededor de 22.000. Enrique Alonso/Jaén
El
Consejo Oleícola Internacional (COI) tiene claro que los olivareros
jiennenses son determinantes para que el planeta tenga aceite de oliva.
No hay que olvidar que es uno de los productos agroalimentarios con
mayor incremento en el consumo durante los últimos años. Si se desea
estabilidad en los precios y tranquilidad entre los operadores, hay que
mirar con lupa el olivar de Jaén y hasta contar sus aceitunas antes de
planificar la próxima campaña comercial en el mundo.Si se toma como referencia el Primer Aforo Oficial de la Junta de Andalucía —580.000 toneladas condicionadas por la necesidad de lluvia, que aún no llega—, Jaén producirá el 41% del zumo de aceituna que dará España. El COI estima que el campo español generará 1.400.000 toneladas. Sin embargo, también da la previsión de cosecha de todos los países, que la sitúa en 3.142.500 toneladas. Si se toma esta cifra como referencia, Jaén será aún más determinante porque se convertirá en la gran “alcuza” del mundo porque dará el 18,4% de la producción mundial.
Los cálculos de los organismos oficiales también desprenden una gran conclusión. Jaén no cede el liderazgo mundial en la producción, pese a que los olivareros han vivido, durante los últimos años, bajo la amenaza de perder peso en la cosecha mundial debido a la entrada en funcionamiento de olivares superintensivos en otros países. Sin embargo, por el momento, esto no ocurre. Jaén que ha ganado terreno y roza, año tras año, el 20% de la cosecha internacional. Por ello, queda claro que los olivareros jiennenses han contrarrestado este fenómeno con más trabajo, regadío, mejores abonos y más rendimiento en las explotaciones. De hecho, hay muchos que introducen más árboles en sus calles para contrarrestar la bajada de precios con más producción.
No perder terreno en esta cosecha es difícil, sobre todo, porque el COI augura que será una de las mayores que ha tenido el mundo. Espera 3.142.500 toneladas de aceite de oliva, que es una cantidad impresionante. No obstante, tranquiliza el incremento del consumo en países que, tradicionalmente, no han utilizado demasiado esta grasa, ya que los grandes importadores se muestran más estables en sus compras.
España liderará la producción mundial gracias a Jaén. De hecho, las 580.000 toneladas de aceite que se le atribuyen no serán superadas por ningún país europeo ni de otro continente. Italia dará 440.000; Grecia, 310.000, y Portugal, 71.800, que son los grandes productores del continente. Precisamente, la UE generará dentro de sus fronteras 2.233.300 toneladas de aceite de oliva.
Otros productores. Siria vuelve a destacar entre los países no europeos productores de grasa de aceituna. El COI le atribuye 200.000 toneladas para la próxima campaña. Túnez y Turquía aportarán 180.000 —cada uno—, mientras que Marruecos se queda en 120.000. Argentina es un país que sorprende porque se estima que dará 15.000 toneladas, pese a que hace tres y cuatro años rondaba las 25.000. Argelia contará con 54.500 y Jordania destaca por su tremenda estabilidad, ya que se queda en 22.000.
Asimismo, existen otros que emergen como productores de aceite de oliva, pese a que, hasta ahora, carecían de tradición. Australia dará 19.000 toneladas. Precisamente, este país es uno de los que mejor comportamiento demuestra en consumo, por lo que sus agricultores se han aventurado en la olivicultura, pese a que Oceanía tiene muchas zonas en las que no se dan las condiciones adecuadas para el olivo, que es un árbol claramente mediterráneo. No obstante, Australia destaca por su tremenda estabilidad en las cosechas, a diferencia de Argentina. Palestina aportará 10.000 toneladas de aceite de oliva y Chile, alrededor de 22.000.
Resulta significativo el caso de Chile, que se ha lanzado al cultivo del olivar con mucho apoyo de sus administraciones. En 2007 produjo 6.500 toneladas. En cambio, para la próxima cosecha se esperan alrededor de 22.000. Enrique Alonso/Jaén
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